En el Centro Histórico de Palermo, el más grande de Europa y hogar de mucho arte y misterio. Este lugar es inconfundible por su arte característico y ha sabido dejar su huella en el tiempo. También es llamada La Martorana, aunque esta iglesia normanda con fachada barroca, lleva su nombre en honor al Almirante Giorgio de Antioquia, quien la mandó a edificar al lado de su palacio, para agradecer a la virgen la protección otorgada durante el cumplimiento de sus funciones siendo la fecha de origen 1.143. Llegó a ser señalada como uno de los monumentos más admirables del cristianismo, así que no alcanzarán las palabras para describir lo majestuoso de su cúpula o sus mosaicos. Es mejor dejar que la elegancia de su campanario, sus columnas bien ornamentadas, sus decorados bizantinos y toda su larga lista de atractivos hablen por sí solos. Así que tenéis que visitarla para comprobarlo.
/-Santa María del Almirante-/