Esta atractiva obra renacentista data del año 1.489 y fue se empezó a construir 8 años antes. Es una pequeña iglesia católica adosada al barrio judío. Comúnmente se le conoce como “la iglesia de mármol”; en su interior sus paredes están decoradas en su totalidad por mármol blanco, rosado y gris. Lo que más atrae la llegada de propios y extranjeros a este lugar, es que en sus instalaciones cuentan con una pintura de la virgen María a la cual se le atribuyen una serie de milagros. Desde 1.470 se inició la creencia de que dicha pintura había salvado la vida de alguien. Desde entonces, son muchas las peregrinaciones que realizan para conocerla. Es una joya perdida que sale al descubierto en un recorrido por la ciudad, la sencillez y belleza a sus detalles labrados con minuciosidad, altamente recomendada en tu ruta de sitios a visitar. /-Santa María deiMiracoli-/