Este sitio es una reproducción a pequeña escala del modo de vida en Venecia. Las típicas casas flotantes, en esta ocasión en una bahía, cuyas olas chocan paulatinamente en las bases de sus casas. El nombre que le dan los lugareños es el de Alefkandra y expone el atributo de la arquitectura del sitio. En el siglo XVIII floreció un grupo de clase pudiente, que gracias a su ingenio logró marcar la diferencia con el resto de construcciones en la isla. Hoy estos edificios no superan las tres plantas; suelen ser el principal centro turístico y en algunas se encuentran galerías y restaurantes. Propicios para una velada inolvidable con un telón de puesta de sol que te encantará. Es básicamente turismo de altura, sobre todo para los que desean compartir un momento selecto. Estas casas que una vez sirvieron de depósitos de botines de piratería.