Se dice de una pequeña villa con todas las edificaciones principales, en la que se ilustra el estilo de vida Sueco. Esta idea fue llevada a cabo a finales del siglo XIX justo en Djurgarden. Vale la pena apartar un día unas cuantas horas para hacer el recorrido a través de sus granjas tradicionales, mercado, iglesias y edificios municipales con un diseño tradicional. Se tratan de 150 piezas arquitectónicas que fueron extraídos de diferentes rincones de Suecia y traídas a este lugar. Es una Suecia original dentro de la Suecia moderna pero que aún conserva su espíritu. No podéis escapar de su deliciosa comida, en alguno de sus puestos distribuidos por el recinto. Para acceder a este parque podéis hacer uso de el Stockholm Pass, así no hay necesidad que pagar, o bien podéis reservar tu ticket e informarte acerca del horario en su sitio web oficial. /-Museo al Aire Libre de Skansen-/