Al recorrer la ciudad resulta difícil no pasar por este lugar. Casi que accidentalmente a cualquier ritmo, como si fuera por mero magnetismo te inducirá a acercarte a este monumento. Jean Sibelius, aquel famoso compositor, cuyos trabajos son símbolos de la cultura de Finlandia, tiene su propio parque, y dentro de él un monumento elaborado en acero que generó mucha polémica en la década de los 60 y que fue levantado en honor a este ilustre. Lo primero que se te vendrá a la cabeza es por qué una figura de tubos abstracta posa al lado de un solitario busto amorfo de Sibelius, pues es una pena que no podamos contar con la interpretación, puesto que su creador se llevó el secreto a la tumba, por lo que nos toca averiguar por medio de teorías de los lugareños.