En el paso a Aragón, esta Colegiata corresponde una parada obligada. Es patrimonio de la Unesco, desde luego por el mudéjar de su torre, así como su ábside y el claustro. Luego de la reconquista en 1.120 la antigua mezquita tiene que convertirse inmediatamente en cristiana, y adoptar el nombre de la virgen bajo la advocación de la asunción. Su categoría de colegiata se presume, fue alcanzada en la época de Alfonso I, debido a la falta de datos. Se convierte en la parroquia mayor de esta ciudad y también en la iglesia de la nobleza. Resulta dichoso contemplar su torre octogonal con 70 metros de altura, cuyo chapitel fue colocado en el siglo XVIII. Dentro de esta colegiata se puede visitar un magnífico museo donde podemos ver un conjunto de pinturas, esculturas y retablos del siglo XV y XVI. /-Colegiata Santa María la Mayor-/
