Este hermoso castillo representa un lugar de refinada arquitectura japonesa. Es un sitio de historias, puesto que sirvió de morada al primer shogun perteneciente a la poderosa familia Tokugawa; una especie de título de alto rango nobiliario y militar, concedido por el emperador y al que se le confería todo el poder administrativo y militar del país entero. Tiene una serie de lugares curiosos como un piso que canta; El shogun no tenía muchos simpatizantes y por lo tanto sufria constantes conspiraciones, motivo que le obligó acondicionar su vivienda en caso de un ataque. Por ello mando a elaborar el suelo con materiales y confección que asemejara el canto del pájaro ruiseñor. El sonido producido hacia escuchar cualquier movimiento no esperado de incursores ninjas. El palacio además cuenta con magnificas pinturas de las que puedes disfrutar en una tarde de deleite visual.