Si eres amante del buen vino y disfrutas del turismo enológico, la visita a está bodega, será sin dunda una de tus mejores experiencias en Castilla-La Mancha. Está finca se situa en Chinchilla de Montearagón, en Albacete, está formada por más de 500 hectáreas que se reparten en diferentes proporciones para el cultivo de olivo y uvas. La bodega posee un rico valor cultural en la localidad y en sus instalaciones podrás disfrutar de catas profesionales y conocer sobres sus vinos más selectos y especiales. En los alrededores de esta bodega, puedes acercarte a la Laguna de Pétrola, un paraje que sin duda forma parte de la belleza de Castilla y La Mancha y también dar un paseo por los rincones del pueblo de Chinchilla, considerado una joya medieval, el cual conserva una parte importante de edificaciones que representan su historia.