Este museo expone un conjunto de maquetas, donde resulta sencillo explicar en qué consistían las termas, cómo eran en su momento, y qué partes quedan hoy en día. En sus vitrinas se exhiben vestigios de lo que conformaría el complejo de termas, así como restos animales y cerámicas de todo el arco atlántico, que prueban la relación de los pueblos celtas, y luego romanos con otros lugares del atlántico, en donde se sostenía un importante comercio. La parte mejor conservada son los cimientos del hipocausto de la ciudad. El recorrido explica las zonas como el vestíbulo, El frigidarium, una piscina fría, tepidarium, y finalmente el caldarium. Se pueden observar algunos restos de pinturas, aunque son muy pocas, son importantes, porque son las únicas pinturas que se conservan en el nor-oeste de la península ibérica. Ya por eso las termas merecen una visita, y si es guiada mucho mejor. /-Termas romanas de Campo Valdés-/