Sin duda, el Castillo de los Moros debe estar en la ruta de cualquier viajero por su valor arquitectónico, histórico y arqueológico. En el tiempo de la conquista cristiana en Portugal, el fuerte fue despoblado. El castillo sufrió un incendio y el azote de la naturaleza a través de un terremoto en el siglo XVIII que lo dejó casi inhabitable. Gran parte de él fue restaurado por el rey Fernando II, con el objetivo de preservar algunos de sus sectores más originarios. Alrededor del castillo está un sitio de investigación arqueológica, muy interesante, que estudia un barrio islámico medieval. Otro de los atractivos del castillo es su Centro de Interpretación Histórica. El recorrido con visita guiada contiene varias exhibiciones de las excavaciones en los terrenos cercanos. /-Castillo de los Moros-/
